No obstante, la eventual pérdida de aquel campeonato significó el lamento por parte de la masa seguidora del equipo pues llevaba una amplia ventaja de puntos durante gran parte del certamen, cediendo la conquista del título de manera poco creíble en la última jornada ante su más tradicional adversario, manchester united tienda Cerro Porteño en un encuentro muy disputado con arbitraje polémico de Carlos Amarilla y un gol legítimo anulado por el juez de línea Juan Zorrilla al equipo franjeado tras un gran cabezazo de Carlos Humberto Paredes en el área cerrista.